Histeria.

Histeria proviene de la palabra griega "hystera" que significa útero.

En la edad media creian que la sintomatología histérica era debida a posesiones demoniacas o embrujamientos. Es más, existía un libro que servía como guía para los inquisidores que se consideraba a su vez ¡¡¡uno de los grandes tratados de la psicopatología de la época !!!

La histeria era una enfermedad típicamente femenina. En las mujeres, en general tratadas de alguna afección neurológica, se manifestaban síntomas como ataques convulsivos, desvanecimientos, parálisis musculares, ..... sin ninguna base orgánica que los provocara.
En el S/XVII Smollius relaciona la histeria con la hipocondría, de manera que está se considerará como la manifestación de la histeria masculina.

A los trastornos derivados del concepto de neurosis histérica hoy día los denominamos trastornos somatomorfos. Trastornos que implican una alteración, no voluntaria, en el funcionamiento físico, y que hay que distinguir de los trastornos psicosomáticos como pueden ser los dolores de cabeza, alteraciones cardiovasculares, problemas gástricos,....... Ya que si bien el desencadenante psicológico y los síntomas físicos son fenómenos comunes a ambos, la diferencia radica en que en los psicosomáticos existe un daño real en el sistema fisiológicos correspondiente, en cambio en los somatomorfos no se desprende patología orgánica demostrable.

Existen diversos modelos explicativos para los t. somatomorfos, uno de ellos es el modelo conductual que explica la sintomatología en función de las ganancias primarias, como serían evitar alguna responsabilidad; Y de las ganancias secundarias, es decir la empatía y la atención que recibe la persona

Es importante remarcar también la diferencia entre estos dos tipos de trastornos con los facticios y simulaciones en los que la presencia de síntomas son fingidos o producidos intencionalmente con el fin de asumir el papel de enfermo en el primer caso, y con el fin de obtener algún beneficio tangible en el segundo